En su palabra (la biblia) Dios asegura que los que creyeron en Cristo (el hijo de Dios) ¡esos son llamados hijos de Dios! (Gálatas 3:26). No es religión, por supuesto, se trata de una relación con Cristo en la que eres guiado por su espíritu (Romanos 8:14) y renuncias a ti mismo (Mateo 16:25). No se trata de sanar tu pasado y asegurarte un futuro terrenal sin dolor, se trata de Cristo no de nosotros.